Washington, 24 ago (Prensa Latina) El japonés Shohei Ohtani es hoy el foco de atención en las Grandes Ligas del béisbol estadounidense, tras convertirse en el sexto jugador de la historia en alcanzar 40 jonrones y 40 bases robadas en una misma temporada.
La proeza cobró vida al más puro estilo de Hollywood: el fuera de serie nipón robó su base 40 en cuarta entrada, y luego, en el noveno inning, con bases llenas y dos outs, disparó cuadrangular gigantesco por la pradera central, para darle el triunfo 7-3 a los Dodgers de Los Ángeles, sobre Tampa.
De esa manera, Ohtani pasó a ser el jugador que menos partidos necesitó para alcanzar el 40-40, apenas 125 juegos.
Antes del extraterrestre japonés habían llegado a esos guarismos el cubano José Canseco (1988), los dominicanos Alex Rodríguez (1998) y Alfonso Soriano (2006), Barry Bonds (1996), y el venezolano Ronald Acuña (2023).
Los Dodgers todavía tienen 33 partidos por disputar, y muchos expertos ya sacan sus cuentas sobre la posible inauguración del club 50-50, algo nunca antes visto, y siendo realistas, muy difícil de alcanzar para el fenómeno nipón de 30 años.
Según ESPN Stats & Information, Ohtani tiene altas probabilidades de ser el primer jugador con 50 bambinazos y 50 bases robadas en una temporada en la historia de la MLB, y además acota que ningún beisbolista ha tenido 45 jonrones y 45 bases robadas en una campaña.